La caída de Microsoft y el apocalipsis digital

caída de Microsoft

Entre más dependemos de Internet, más tememos que un día algo falle y desaparezcan todos nuestros archivos de la nube de datos, todas nuestras herramientas de trabajo, incluso nuestras amistades y recuerdos más preciados.  

Cada vez que falla algún software o alguna red social, queda mejor demostrado cuánto le tememos al apocalipsis digital. El último caso fue la falla de Microsoft del 19 de julio de este año que afectó a miles de usuarios. 

¿Qué pasó con Microsoft el 19 de julio? 

Empresas y servicios clave para el funcionamiento de los países vieron interrumpidas sus actividades por una falla en las herramientas que les brinda Microsoft. Entre los afectados, había asuntos tan delicados como aerolíneas, hospitales y medios de comunicación.  

De acuerdo con el New York Times, “los vuelos se suspendieron en muchos países, los trabajadores no pudieron acceder a sus sistemas y, en algunos casos, los clientes no pudieron realizar pagos con tarjeta en las tiendas”.  

La gran mayoría de las fallas se resolvieron en cuestión de horas, todos recuperamos nuestros archivos y herramientas de trabajo, y no pasó de algunos retrasos, pero muchas empresas y sitios web entraron en una ola de fallas que retrasaron la recuperación de sus sistemas. 

“El problema que afectó a la mayoría de los servicios fue causado por una actualización defectuosa de CrowdStrike, una empresa estadounidense de ciberseguridad, cuyos sistemas están destinados a proteger a los usuarios de los piratas informáticos”, según el New York Times. 

Esta falla, que fue llamada Microsoft Outage o la interrupción de Microsoft, muestra cómo la economía mundial depende de un puñado de empresas tecnológicas. 

Las acciones de CrowdStrike cayeron casi 12% en las operaciones previas a la apertura del mercado, mientras que las acciones de Microsoft bajaron alrededor de 1.4%. 

En cifras más claras, la falla afectó a 8.5 millones de computadoras en todo el mundo y, según el New York Post, empresas de tamaño considerable en Estados Unidos sufrieron pérdidas de 5,400 millones de dólares por esta breve interrupción. Por su parte, se estima que las pérdidas de Microsoft sumarán cientos de millones de dólares más al total.

 

El miedo al apocalipsis digital 

Cada vez que ocurre alguna de estas fallas, salen a la luz cientos de teorías de la conspiración que aseguran que llegará un apocalipsis digital, el cual hará que el mundo entero regrese a como era antes de la llegada de Internet.  

En el año 2000, ocurrió el famoso Y2K o error del milenio que, de acuerdo con National Geographic, “provocó ansiedad y el susto” en todo el planeta.  

“Cuando se empezaron a escribir complejos programas informáticos en los años 60, los ingenieros utilizaban un código de dos dígitos para el año, omitiendo el ‘19’. A medida que se acercaba el año 2000, muchos creyeron que los sistemas no interpretarían correctamente el ‘00’, y provocaría así un fallo importante en el sistema”. 

Se creía que, a partir del año nuevo del 2000, los aviones caerían del cielo, todas las bases de datos se borrarían y los bancos colapsarían. Hubo personas que guardaron todo su dinero en el colchón y otras que incluso se mudaron al campo, pues pensaron que la gente se volvería violenta en las ciudades. Al final, hubo muy pocos problemas. 

Así, cada vez que fallan WhatsApp, Facebook, X, o sistemas operativos como Microsoft presentan errores, nos queda claro cómo nuestras vidas dependen de lo que sucede en los servidores de estas compañías. 

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