Te hace falta ver más ads
Dicen que el impacto de una campaña publicitaria se nota —o mide— en ventas o KPIs; métricas cuantificables que realmente reflejan la efectividad de un anuncio, pues de todas esas personas a las que fue dirigido el mensaje, la mayoría, idealmente, salió a comprar el producto en cuestión, en este caso, una cerveza.
Aunque ese es su objetivo inicial (aumentar las ventas), en ocasiones, la popularidad que alcanzan ciertas campañas hace que terminen trascendiendo su enfoque comercial y se coloquen indeleblemente en el inconsciente colectivo y el zeitgeist de la época. Esos comerciales y campañas pueden incluso dejar atrás el producto que las respalda (o les da propósito) para volverse un éxito por méritos propios. Esos son los ejemplos que veremos a continuación, a propósito del Día Internacional de la Cerveza.
Un ejemplo reciente y local es el que da origen al subtítulo de este artículo: la campaña “Te hace falta ver más box”, la cual no solo ayudó a posicionar a la cerveza Tecate como un acompañante ideal para las transmisiones televisivas del pugilismo en México, sino que se encargó de regresar a la relevancia entre personas jóvenes a una cerveza normalmente vista como “inferior” u “ordinaria”. Todo gracias a un eslogan pegajoso y la presencia de auténticas leyendas del box real y ficticio como Sylvester Stallone, Julio C. Chávez y Marco Antonio Barrera.
Tecate intentaría recapturar la magia del “bax” unos años después al reclutar al siempre genial Bruce Willis para una nueva serie de anuncios igualmente pensados en “el hombre de acción” como target. Sin embargo, el rayo no golpeó dos veces y, desde entonces, la marca parece haber regresado a la intrascendencia, sepultada por la avalancha de productos importados que han inundado el mercado nacional en años recientes.
Sol, cerveza y carisma
Siguiendo con México, aunque a una escala mil veces mayor al ejemplo anterior —de hecho, se trata de una campaña de alcance mundial—, no podemos olvidar la magnífica, inolvidable y por demás ubicua serie de comerciales de “la playa Corona”. Una playa, sol, mar, una (o varias) cervezas Corona enterradas en la arena o en una cubeta con hielo. Nada más. La genialidad de esos spots estuvo en la simpleza y elegancia con la que logró transmitir su mensaje.
Pero si los comerciales de Corona fueron tan famosos que en algún momento llegaron a ser parodiados y copiados hasta el cansancio, ¿qué hay de una campaña que alcanzó el estatus de meme, mucho antes de que el término se volviera parte del uso cotidiano de las mamás en Facebook?
He aquí “El hombre más interesante del mundo”, una propuesta de Dos Equis que inspiraría a marcas como Old Spice a contar historias extraordinarias y presentar escenarios fantásticos, de la mano de un protagonista carismático y encantador. Las mujeres quieren estar con él; los hombres quieren ser como él; él es solo un hombre que no siempre toma cerveza, pero cuando lo hace, es Dos Equis.
Ahora, de un personaje que parece haber salido de una película de James Bond, a un grupo de stoners sacados de una cinta de Cheech & Chong; Budweiser aprovechó la popularidad de la recientemente estrenada Scary Movie para, en 1999, estrenar su comercial “Wassup” durante el Super Bowl XXXIV. Absurdo, bobo y a la vez hilarante y lleno de nostalgia, este comercial puede parecer un producto de su tiempo, pero fue tan efectivo que, según reportes, ayudó a impulsar las ventas de la cerveza por 2.4 millones de barriles.
Brindis por los comerciales que hicieron historia
And now for something completely different… La referencia a Monty Python no es accidental; ahora nos vamos al Reino Unido para algo realmente distinto, único y trascendental; un anuncio tan impresionante que continuamente es catalogado entre los mejores comerciales de la historia, mercado de bebidas alcohólicas o no.
Dirigido por el legendario Jonathan Glazer (Sexy Beast, Under the Skin) y con la palpitante música de Leftfield como fondo, “The Surfer” pinta una sublime escena protagonizada por un surfista acechando a su presa —el mar—, esperando el instante exacto para montar la ola perfecta y domar a la bestia acuática. El mensaje es simple: “cosas buenas aguardan al que espera”, pero la energía y audacia de la obra, desde la fotografía monocromática hasta los efectos visuales, convierten a un ordinario anuncio para la cerveza Guinness, en una auténtica obra de arte.
El storytelling es el núcleo de muchos de estos anuncios de cerveza, pero el arte de contar historias está en todos lados, descubre cómo funciona en el mundo de los cómics.